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acceso al empleo en este colectivo, atención de salud mental
aún más que el cociente intelectual. en discapacidad intelectual
en el sistema sanitario del La biología de
Intervención en salud mental. Reino Unido. las personas con
De lo micro a lo macro.
En los años 90, esta red discapacidad intelectual
Las personas con discapacidad se replica en nuestro país es más vulnerable
intelectual presentan elevadísimas en Cataluña y en 2005 ya al desarrollo de una
cifras de problemas de salud men- aparecen recursos en la enfermedad mental
tal. Y desde el marco actual es fácil
entender esta situación, donde un Comunidad de Madrid, y
individuo más vulnerable se encuen- así progresivamente se van
tra en un entorno no diseñado para creando servicios en el resto
él. Y aún más, esta situación no de comunidades autónomas.
sólo conlleva malestar en un elevado Estos dispositivos que
número de personas, sino que ade- progresivamente vamos
más supone una carga añadida para implantando constituyen
cuidadores y servicios de atención. un importante avance en el
desarrollo de la atención a
Paralelo al reconocimiento de los las personas con discapaci-
derechos de las personas con discapa- dad intelectual.
cidad y a la consiguiente atención a Sin embargo, abordan
su salud mental, como no podía ser el problema desde lo micro,
de otra manera, se ha puesto en mar- o dicho de otra manera,
cha una red de recursos de atención contienen el problema una
específica. vez sobrevenido; pues cómo
vamos apuntando, parte de
Pese a las dudas que alertan de la la globalidad de los proble-
falta de inclusión que conlleva una mas de salud mental de las
atención específica a la salud men- personas con discapacidad
tal de la discapacidad intelectual, intelectual reside en una
las diferencias psiquiátricas de este sociedad que aún no los
colectivo han llevado a la puesta en contempla como plenos
marcha de recursos específicos en miembros de ella.
lugar de comunitarios. Centrados en esta pers-
pectiva micro de abordar el
Las dificultades para entrevistas problema desde el individuo, tam- modificación de conducta, donde
diagnósticas, la diferente manifesta- bién se ha visto una evolución en las el fin no es eliminar una conducta
ción de los síntomas, la diferencia en terapias. Cada vez impera menos el desadaptada, sino conseguir una
las terapias, la vulnerabilidad ante los modelo “biologicista” en el que se mejor calidad de vida de la per-
ingresos en unidades de agudos y los medica indiscriminadamente a la per- sona, como constata la aparición
diferentes tiempos de recuperación sona con el fin de acallar la alteración del apoyo conductual positivo o
han justificado la aparición de cen- conductual, o en el que se aplican de la planificación centrada en la
tros de atención y de profesionales impersonales tratamientos de modifi- persona.
específicamente destinados a la aten- cación de conducta de nuevo buscan- Sin embargo, serán las políti-
ción de la salud mental de las perso- do eliminar la alteración sin escuchar cas públicas y una plena participa-
nas con discapacidad intelectual. lo que ésta encierra, para dar paso a ción en nuestra sociedad las que
un modelo de terapia más global. realmente consigan que la salud
Los primeros servicios de aten- Estas nuevas terapias recogen la mental de las personas con disca-
ción a la salud mental de las per- posibilidad de medicación, pero sólo pacidad intelectual se aleje de esas
sonas con discapacidad intelectual cuando ésta se confirme justificada, terribles cifras para caminar pareja
aparecen en Estados Unidos a finales y han agrandado las miras de la a la del resto de ciudadanos.
de la década de los 70, resaltando
la creación en 1982 de la red de
MARTORELL A, GUTIERREZ-RECACHA P, PEREDA A, disturbance and mental retardation: Diagnostic oversha-
AYUSO-MATEOS JL (2008). Identification of personal dowing. American Journal of Mental Deficiency, 86: 567-
factors that determine work outcome for adults with inte- 574.
llectual disability. Journal of Intellectual Disability Research WORLD HEALTH ORGANIZATION. (2001). International
vol 52 (12): 1091-101. Classification of Functioning, Disability and Health (ICF).
NYHAN WL (1972). Behavioral phenotypes in organic Geneva: World Health Organization. / Clasificación
genetic disease. Pediatric Research 6: 1–9. Internacional del Funcionamiento, de la Discapacidad y de
REISS, S.; LEVITAN, G.; SZYSKO, J. (1982). Emotional la Salud (CIF). Madrid: IMSERSO 2002.
A utonpeorsmoníaal 43
aún más que el cociente intelectual. en discapacidad intelectual
en el sistema sanitario del La biología de
Intervención en salud mental. Reino Unido. las personas con
De lo micro a lo macro.
En los años 90, esta red discapacidad intelectual
Las personas con discapacidad se replica en nuestro país es más vulnerable
intelectual presentan elevadísimas en Cataluña y en 2005 ya al desarrollo de una
cifras de problemas de salud men- aparecen recursos en la enfermedad mental
tal. Y desde el marco actual es fácil
entender esta situación, donde un Comunidad de Madrid, y
individuo más vulnerable se encuen- así progresivamente se van
tra en un entorno no diseñado para creando servicios en el resto
él. Y aún más, esta situación no de comunidades autónomas.
sólo conlleva malestar en un elevado Estos dispositivos que
número de personas, sino que ade- progresivamente vamos
más supone una carga añadida para implantando constituyen
cuidadores y servicios de atención. un importante avance en el
desarrollo de la atención a
Paralelo al reconocimiento de los las personas con discapaci-
derechos de las personas con discapa- dad intelectual.
cidad y a la consiguiente atención a Sin embargo, abordan
su salud mental, como no podía ser el problema desde lo micro,
de otra manera, se ha puesto en mar- o dicho de otra manera,
cha una red de recursos de atención contienen el problema una
específica. vez sobrevenido; pues cómo
vamos apuntando, parte de
Pese a las dudas que alertan de la la globalidad de los proble-
falta de inclusión que conlleva una mas de salud mental de las
atención específica a la salud men- personas con discapacidad
tal de la discapacidad intelectual, intelectual reside en una
las diferencias psiquiátricas de este sociedad que aún no los
colectivo han llevado a la puesta en contempla como plenos
marcha de recursos específicos en miembros de ella.
lugar de comunitarios. Centrados en esta pers-
pectiva micro de abordar el
Las dificultades para entrevistas problema desde el individuo, tam- modificación de conducta, donde
diagnósticas, la diferente manifesta- bién se ha visto una evolución en las el fin no es eliminar una conducta
ción de los síntomas, la diferencia en terapias. Cada vez impera menos el desadaptada, sino conseguir una
las terapias, la vulnerabilidad ante los modelo “biologicista” en el que se mejor calidad de vida de la per-
ingresos en unidades de agudos y los medica indiscriminadamente a la per- sona, como constata la aparición
diferentes tiempos de recuperación sona con el fin de acallar la alteración del apoyo conductual positivo o
han justificado la aparición de cen- conductual, o en el que se aplican de la planificación centrada en la
tros de atención y de profesionales impersonales tratamientos de modifi- persona.
específicamente destinados a la aten- cación de conducta de nuevo buscan- Sin embargo, serán las políti-
ción de la salud mental de las perso- do eliminar la alteración sin escuchar cas públicas y una plena participa-
nas con discapacidad intelectual. lo que ésta encierra, para dar paso a ción en nuestra sociedad las que
un modelo de terapia más global. realmente consigan que la salud
Los primeros servicios de aten- Estas nuevas terapias recogen la mental de las personas con disca-
ción a la salud mental de las per- posibilidad de medicación, pero sólo pacidad intelectual se aleje de esas
sonas con discapacidad intelectual cuando ésta se confirme justificada, terribles cifras para caminar pareja
aparecen en Estados Unidos a finales y han agrandado las miras de la a la del resto de ciudadanos.
de la década de los 70, resaltando
la creación en 1982 de la red de
MARTORELL A, GUTIERREZ-RECACHA P, PEREDA A, disturbance and mental retardation: Diagnostic oversha-
AYUSO-MATEOS JL (2008). Identification of personal dowing. American Journal of Mental Deficiency, 86: 567-
factors that determine work outcome for adults with inte- 574.
llectual disability. Journal of Intellectual Disability Research WORLD HEALTH ORGANIZATION. (2001). International
vol 52 (12): 1091-101. Classification of Functioning, Disability and Health (ICF).
NYHAN WL (1972). Behavioral phenotypes in organic Geneva: World Health Organization. / Clasificación
genetic disease. Pediatric Research 6: 1–9. Internacional del Funcionamiento, de la Discapacidad y de
REISS, S.; LEVITAN, G.; SZYSKO, J. (1982). Emotional la Salud (CIF). Madrid: IMSERSO 2002.
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