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INTE GR A CIÓN

                                             RAMÓN ARROYO


                        EL HÉROE CON ESCLEROSIS MÚLTIPLE QUE PASÓ DE “NO PODER CAMINAR 200
                              METROS” A REALIZAR UN IRONMAN Y LLEVAR SU HISTORIA AL CINE
















                                   Una historia de superación




                      NADIE MEJOR QUE ÉL PARA RESUMIR ESTA HISTORIA: “PIERDES LAS SENSACIONES
                   PERO PARECE QUE TAMBIÉN LOS SENTIMIENTOS”. SEGÚN RELATA RAMÓN ARROYO, SU
                     EXISTENCIA SE CONVIERTE A LA DE UN SUPERHÉROE DE INCÓGNITO, UN SUPERMAN
                        SIN CAPA QUE CALZA ZAPATILLA Y QUE CORRE, CORRE, CORRE TANTO QUE VA
                                  DEJANDO ATRÁS PESADILLAS DE LAS QUE HUYE IMPÁVIDO.




                         Miguel Núñez              sar  ¿ahora qué?  “Más  del 50%  de   recuerda el episodio que lo cambió
                                                   las personas que sufren esclerosis   todo. Un día, mientras Ramón es-
                        unque siempre llegue prime-  múltiple no lo revelan más allá de   taba sentado a los pies de la cuna
                        ro a la meta también lo hace   su entorno más cercano”, afirma   de Borja, este tendió una de sus
                   Ala esclerosis múltiple con la   Ramón cada vez que imparte una   manitas. Rápidamente su padre la
                   que  compite desde  aquel  verano   conferencia contando su experien-  sostuvo entre las suyas, pero sin
                   de 2004. “Por aquel entonces fu-  cia. “A mí la EM me ha aportado   poder cogerlo.  “Tengo que hacer
                   maba, y estando de vacaciones   mucho más de lo que me ha qui-  algo”, dijo compungido antes de
                   en Almería se me cayó un pitillo al   tado”. Y eso es mucho decir. Todo   enfrentarse a la enfermedad des-
                   suelo y más tarde otro…” Empeza-  se fue cumpliendo con un desazón   de la aceptación.
                   ba a tener debilidades en las ma-  continuo: depresión, fatiga, inacti-
                   nos y perdía fuerza en los brazos,   vidad y un veredicto autoimpuesto:   200 METROS
                   pero “también en la pierna y en la   culpable. “Empecé a echarme la   Ramón empezaba a estar de buen
                   cara, que se quedaba dormida pro-  culpa por el excesivo consumo de   humor. Cardiovascularmente es-
                   vocando que me trabase al hablar”.   tabaco, el sobrepeso, horarios des-  taba bien, el problema era neuro-
                   El diagnóstico dejó pétreo a Ramón   controlados”.             lógico. Si nuestro cuerpo es capaz
                   e Inma, su inseparable mujer. Poco                             de producir una serie de hormo-
                   sabían sobre la esclerosis múltiple,   No admitir la enfermedad le lle-  nas,  tres de  las cuales  son  res-
                   “una enfermedad crónica del sis-  vó  a  reincorporarse  al  trabajo,  a   ponsables del placer y la motiva-
                   tema nervioso central autoinmune   volver a viajar antes de lo previs-  ción (dopamina),  aliviar el estado
                   que  afecta a la mielina  o  materia   to, a desconfiar de todos… ¿no me   de ánimo (serotonina) y producir
                   blanca del cerebro y la médula es-  decía el médico que hiciese una   felicidad (endorfina), ¿por qué no
                   pinal”. Y lo peor, las pocas sospe-  vida normal? se justificaba con   darle una alegría al cuerpo? Con-
                   chas de cuándo puede aparecer y   una pregunta irónica que rápida-  sultó  con  Marisa,  su  doctora.  “El
                   el miedo a lo desconocido.  “Pue-  mente respondía lacónicamente,   deporte es bueno, pero no vayas
                   des padecer un brote al año, diez o   “estoy  mal  diagnosticado”.  Cerra-  más allá de tus límites”. En ese
                   uno en tu vida”. La angustia carco-  do en sí mismo, sólo una persona   momento  fue  inevitable  acordar-
                   me toda esperanza y te hace pen-  tenía acceso a su interior. Inma   se de un doctor que en su día le


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