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CULTURA
Máscara de Malinaltepec MADRID/Cristina Fariñas
Fotos: Caixaforum Madrid
Una muestra que recoge ocho siglos de historia arqueológica
sta ciudad llegó a ser
TEOTIHUACAN, la sexta ciudad más
CIUDAD DE LOS DIOSES grande del mundo en
su tiempo. Declarada
Una muestra de 400 piezas arqueológicas de
Teotihuacan, un ciudad situada a cuarenta y cinco EPatrimonio Cultural
kilómetros de la ciudad de Méjico, se exhibe en de la Unesco, en 1987,
Caixaforum de Madrid, del 27 de julio al 13 de es una de las grandes maravillas
noviembre. del mundo. Sus principales monu-
Teotihuacan fue durante ochocientos años, (del mentos –la pirámide del Sol y la
siglo II a.C. al siglo VII d.C:) el centro cultural, Pirámide la Luna, unidas por la cal-
político y religioso de una potente civilización. zada de los Muertos, el bellísimo
En la exposición, el visitante descubrirá esta palacio del Jaguar de Xalia o el tem-
gran ciudad a través de algunos de los aspectos plo de Quetzalcóalt– son referentes
más notables de su cultura: ideología, poder, de la cultura universal.
arte, sociedad, religión, guerra, tradiciones, vida
cotidiana y, por supuesto, la influencia que legó esta La exposición, organizada por el
civilización a las diferentes culturas prehispánicas. Instituto Nacional de Antropología
e Historia de México, contienen
A90 perusotnoanl omía obras procedentes de los principales
museos pertenecientes al Instituto
Nacional de Antropología e Historia
de México, entre los cuales destacan
el Museo Nacional de Antropología,
la Zona Arqueológica de Teotihuacan
y el Museo del Templo Mayor. Las
obras de estas colecciones se com-
plementan con otras procedentes de
colecciones privadas, como la que
el pintor Diego Rivera reunió en el
palacio de Anahuacalli.
¿Cómo era la vida en Teotihuacan?
¿Cómo eran los hombres y mujeres
que la habitaban? ¿Cómo se organi-
zaba la sociedad? ¿Cuáles eran sus
creencias? ¿Por qué se produjo su
declive? La exposición da respuestas
a estas preguntas.
La muestra sigue el recorrido
planteado por el arqueólogo Felipe
Solís, comisario de la exposición y
una de las máximas autoridades sobre
el mundo prehispánico, que murió
un mes antes de la primera inaugura-
ción en Monterrey. Los seis ámbitos
de la muestra presentan no sólo obras
de arte, sino también objetos de uso
cotidiano para ofrecer al visitante una
inmersión lo más completa posible
de esa cultura.
Teotihuacan significa en lengua
náhuatl, “el lugar de los dioses” o “el
lugar donde se hacen dioses”. Como
gran metrópoli, Teotihuacan marcó
la pauta de la política, el comer-
cio y la ideología en buena parte
de Mesoamérica durante el periodo
150 a.C.-650 d.C. Tal fue la magni-
ficencia e importancia de esta urbe
que, incluso siglos después de su
Máscara de Malinaltepec MADRID/Cristina Fariñas
Fotos: Caixaforum Madrid
Una muestra que recoge ocho siglos de historia arqueológica
sta ciudad llegó a ser
TEOTIHUACAN, la sexta ciudad más
CIUDAD DE LOS DIOSES grande del mundo en
su tiempo. Declarada
Una muestra de 400 piezas arqueológicas de
Teotihuacan, un ciudad situada a cuarenta y cinco EPatrimonio Cultural
kilómetros de la ciudad de Méjico, se exhibe en de la Unesco, en 1987,
Caixaforum de Madrid, del 27 de julio al 13 de es una de las grandes maravillas
noviembre. del mundo. Sus principales monu-
Teotihuacan fue durante ochocientos años, (del mentos –la pirámide del Sol y la
siglo II a.C. al siglo VII d.C:) el centro cultural, Pirámide la Luna, unidas por la cal-
político y religioso de una potente civilización. zada de los Muertos, el bellísimo
En la exposición, el visitante descubrirá esta palacio del Jaguar de Xalia o el tem-
gran ciudad a través de algunos de los aspectos plo de Quetzalcóalt– son referentes
más notables de su cultura: ideología, poder, de la cultura universal.
arte, sociedad, religión, guerra, tradiciones, vida
cotidiana y, por supuesto, la influencia que legó esta La exposición, organizada por el
civilización a las diferentes culturas prehispánicas. Instituto Nacional de Antropología
e Historia de México, contienen
A90 perusotnoanl omía obras procedentes de los principales
museos pertenecientes al Instituto
Nacional de Antropología e Historia
de México, entre los cuales destacan
el Museo Nacional de Antropología,
la Zona Arqueológica de Teotihuacan
y el Museo del Templo Mayor. Las
obras de estas colecciones se com-
plementan con otras procedentes de
colecciones privadas, como la que
el pintor Diego Rivera reunió en el
palacio de Anahuacalli.
¿Cómo era la vida en Teotihuacan?
¿Cómo eran los hombres y mujeres
que la habitaban? ¿Cómo se organi-
zaba la sociedad? ¿Cuáles eran sus
creencias? ¿Por qué se produjo su
declive? La exposición da respuestas
a estas preguntas.
La muestra sigue el recorrido
planteado por el arqueólogo Felipe
Solís, comisario de la exposición y
una de las máximas autoridades sobre
el mundo prehispánico, que murió
un mes antes de la primera inaugura-
ción en Monterrey. Los seis ámbitos
de la muestra presentan no sólo obras
de arte, sino también objetos de uso
cotidiano para ofrecer al visitante una
inmersión lo más completa posible
de esa cultura.
Teotihuacan significa en lengua
náhuatl, “el lugar de los dioses” o “el
lugar donde se hacen dioses”. Como
gran metrópoli, Teotihuacan marcó
la pauta de la política, el comer-
cio y la ideología en buena parte
de Mesoamérica durante el periodo
150 a.C.-650 d.C. Tal fue la magni-
ficencia e importancia de esta urbe
que, incluso siglos después de su