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La amistad, esa gran desconocida

                                                                              Una buena amistad es

                                                                              una suerte muy grande
                                                                              que nos acompaña y
                                                                              reconforta durante toda
                                                                              la vida.






          que a los seres con los cuales nos   tencia, que lo convierte en algo   de una parte de su ser, sino que
          está permitido ser nosotros mis-  que debería ser imperecedero; re-  también logra que quien le es-
          mos sin rigidez y sin mentira. Otro   cuerdo la frase de Voltaire, cuan-  cucha, además de aprender, se
          literato, el italiano  Alberto Mo-  do dijo: cambiad de placeres, pero   encontrará más feliz consigo
          ravia (1907-1990), Premio Nobel   no cambiéis de amigos.            mismo, estableciéndose una es-
          de Literatura, también se interesó                                  pecie de simbiosis natural, que
          por el tema, como lo confi rma su   La amistad es algo que, como    contribuye al aprendizaje de los
          frase:  la amistad es más difícil y   bien decía Unamuno, no cesa   jóvenes, y también a la sensación
          más rara que el amor; por eso, hay   de perfeccionarnos y enriquecer-  de haber llevado a cabo una labor
          que salvarla como sea.            nos a lo largo de nuestra vida, al   enriquecedora, por parte de los
                                            tiempo que permite descubrir en   mayores. Y esto, además de amis-
          Después de todas estas contun-    el interior de nuestro ser nuestras   tad, es generosidad y amor.
          dentes máximas, creemos poder     debilidades y virtudes, para desa-
          llegar a conclusiones sorprenden-  rrollarlas por el bien de los demás   La amistad forma parte de nues-
          tes. La primera, podría ser, que la   y de nosotros mismos.         tras vidas, de nuestros instantes, a
          amistad es el cúmulo de experien-                                   lo largo de toda nuestra existencia.
          cias gratifi cantes que una persona   De todos estos factores, que for-  Pero la amistad no surge por arte
          recibe de otra, sin esperar nada a   man parte de este bien inmaterial   de magia, es preciso saber dar;
          cambio. Que el amigo es alguien   que tenemos a nuestro alcance,    porque, como ya hemos leído a
          que siempre está ahí, a la sombra,   como es la amistad, saben mu-  personas mucho más doctas que
          sin hacer ruido, aguardando el    cho los mayores. Cuando, en un    nosotros, los pilares de la amistad
          momento para ayudarte. Si Dios    banco de una plaza, a la sombra   no pueden elevarse sobre el interés,
          elige a nuestros familiares, somos   de unos árboles; en una silla de   ni el egoísmo de las circunstancias.
          nosotros quienes seleccionamos    la sala de actividades de un Ho-  Todos somos necesarios, aunque
          nuestras amistades. La amistad    gar del Pensionista, o cuando, en   no hay nadie que sea imprescin-
          no tiene por qué estar relaciona-  casa, están contándole un cuento   dible en esta vida. Por lo tanto,
          da con la distancia; a veces, los   a sus nietos, las personas mayores   todas las personas deben saber
          mejores amigos están lejos de no-  están desarrollando unas pautas   respetarse, y, gracias a la amistad,
          sotros, pero que, cuando reque-   de comportamiento aprehendi-      mantener una relación cordial, sin
          rimos su presencia, o su consejo,   das que deben mantenerse a per-  agobios ni intromisiones en las
          siempre están próximos. No debe-  petuidad, como es el de saber dar,   vidas privadas de ambos. Siem-
          mos, además, confundir amistad    sin pedir nada a cambio. Este sin-  pre debemos mantener un límite
          y compañerismo; lo primero está   gular comportamiento es fruto de   en nuestras acciones, para que la
          siempre por encima, en cuanto a   una experiencia, que los mayores   amistad perdure. También es im-
          los valores inmateriales, mientras   saben practicar, mejor que na-  portante saber elegir a los amigos;
          que lo segundo, es circunstancial,   die, en benefi cio de los seres que   porque, como dice otro refrán, no
          por el aspecto laboral, académi-  le rodean; porque, al hacerlo, al   menos sabio: "dime con quién an-
          co, de relación social, etc. Y lo   transmitir estos conocimientos y   das, y te diré quién eres"; porque
          mismo sucede si confundimos la    sabiduría acumulada, están en-    el que se hace amigo de un mal su-
          amistad y el amor; como ya se ha   tregando a quienes les oyen una   jeto ha de esperar que esta amis-
          citado antes, por personas mucho   parte de su ser, para enriquecer a   tad le reportará a la larga otras
          más doctas que nosotros; en la    quienes les escuchan, a modo de   amistades peores. Sin embargo,
          amistad se produce un fenóme-     confi dencialidad acordada inter-  una buena amistad es una suerte
          no socio-cultural que rebasa los   generacional, en la cual, quien   muy grande que nos acompaña y
          límites humanos de nuestra exis-  transmite, no sólo se desprende   reconforta durante toda la vida.

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