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LA DEPENDENCIA
rresponde encuadrarla. Sobre el más problemas de frontera en el ● Dependencia severa:
baremo, en el Capítulo corres- momento de la valoración y, co- Cuando la persona necesita
pondiente de valoración de la mo consecuencia, un mayor nú- ayuda para realizar varias acti-
dependencia se analizan en pro- mero de reclamaciones, además vidades básicas de la vida dia-
fundidad las distintas alternati- de una mayor complejidad en la ria dos o tres veces al día, pero
vas posibles. Se considera que gestión. No obstante, cabe es- no requiere la presencia per-
la clasificación de la dependen- tudiar la incorporación de nive- manente de un cuidador.
cia debería establecerse en tres les dentro de un mismo grado
grados. Ello permite graduar la con el fin de facilitar la asigna- ● Gran dependencia: Cuan-
dependencia, discriminando las ción de recursos de una forma do la persona necesita ayuda
situaciones de menor a mayor más ajustada a las necesidades. para realizar varias activida-
intensidad, facilitando a la vez des básicas de la vida diaria
la valoración y la gestión de la ● Dependencia moderada: varias veces al día y, por su
prestación. La incorporación de Cuando la persona necesita pérdida total de autonomía
un cuarto grado, aunque pudie- ayuda para realizar varias acti- mental o física, necesita la
ra parecer que discrimina me- vidades básicas de la vida dia- presencia indispensable y
jor, entendemos que plantearía ria, al menos una vez al día. continua de otra persona.
Estimación del número
de personas dependientes
Para las estimaciones que La mejor forma de estimar la vidades básicas de la vida dia-
se presentan a continuación, población dependiente a prote- ria (lo que constituye el “nú-
partimos de la hipótesis de ger, según estos criterios, a par- cleo duro” de las situaciones
que se considerará que una tir de la información que pro- de dependencia, que cualquier
persona es dependiente, a los porciona la EDDES 99, es cen- sistema de atención de la de-
efectos de tener derecho a trarse en las personas que tie- pendencia debería priorizar) en
protección con cargo al Siste- nen una discapacidad severa o unas novecientas cincuenta y
ma Nacional de Dependencia, total para alguna de las activi- nueve mil ochocientas noventa.
cuando no pueda realizar, sin dades básicas de la vida diaria,
ayuda, alguna de las activida- que señalábamos en el aparta- Junto a ese “núcleo duro”,
des básicas de la vida diaria do anterior. Puede así cifrarse, constituido por las personas
relacionadas con el cuidado con referencia a 1999, el nú- que, sin una ayuda y cuidado
personal, la movilidad dentro mero de personas con depen- permanente, verían seriamente
del hogar o las funciones men- dencia severa y total para reali- comprometida su superviven-
tales básicas. zar alguna de estas nueve acti- cia, hay que considerar tam-
12 Sesenta y más
rresponde encuadrarla. Sobre el más problemas de frontera en el ● Dependencia severa:
baremo, en el Capítulo corres- momento de la valoración y, co- Cuando la persona necesita
pondiente de valoración de la mo consecuencia, un mayor nú- ayuda para realizar varias acti-
dependencia se analizan en pro- mero de reclamaciones, además vidades básicas de la vida dia-
fundidad las distintas alternati- de una mayor complejidad en la ria dos o tres veces al día, pero
vas posibles. Se considera que gestión. No obstante, cabe es- no requiere la presencia per-
la clasificación de la dependen- tudiar la incorporación de nive- manente de un cuidador.
cia debería establecerse en tres les dentro de un mismo grado
grados. Ello permite graduar la con el fin de facilitar la asigna- ● Gran dependencia: Cuan-
dependencia, discriminando las ción de recursos de una forma do la persona necesita ayuda
situaciones de menor a mayor más ajustada a las necesidades. para realizar varias activida-
intensidad, facilitando a la vez des básicas de la vida diaria
la valoración y la gestión de la ● Dependencia moderada: varias veces al día y, por su
prestación. La incorporación de Cuando la persona necesita pérdida total de autonomía
un cuarto grado, aunque pudie- ayuda para realizar varias acti- mental o física, necesita la
ra parecer que discrimina me- vidades básicas de la vida dia- presencia indispensable y
jor, entendemos que plantearía ria, al menos una vez al día. continua de otra persona.
Estimación del número
de personas dependientes
Para las estimaciones que La mejor forma de estimar la vidades básicas de la vida dia-
se presentan a continuación, población dependiente a prote- ria (lo que constituye el “nú-
partimos de la hipótesis de ger, según estos criterios, a par- cleo duro” de las situaciones
que se considerará que una tir de la información que pro- de dependencia, que cualquier
persona es dependiente, a los porciona la EDDES 99, es cen- sistema de atención de la de-
efectos de tener derecho a trarse en las personas que tie- pendencia debería priorizar) en
protección con cargo al Siste- nen una discapacidad severa o unas novecientas cincuenta y
ma Nacional de Dependencia, total para alguna de las activi- nueve mil ochocientas noventa.
cuando no pueda realizar, sin dades básicas de la vida diaria,
ayuda, alguna de las activida- que señalábamos en el aparta- Junto a ese “núcleo duro”,
des básicas de la vida diaria do anterior. Puede así cifrarse, constituido por las personas
relacionadas con el cuidado con referencia a 1999, el nú- que, sin una ayuda y cuidado
personal, la movilidad dentro mero de personas con depen- permanente, verían seriamente
del hogar o las funciones men- dencia severa y total para reali- comprometida su superviven-
tales básicas. zar alguna de estas nueve acti- cia, hay que considerar tam-
12 Sesenta y más
