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La tierra como nexo intergeneracional

















        Cultivar un pequeño
        huerto ayuda a las
        personas mayores

        a conservar activas
        sus capacidades
        psicológicas y sociales
        y el entrenamiento
        que supone agacharse,
        levantarse o cargar
        y manipular objetos,
        potencia las cualidades
        físicas necesarias para

        mantenerse autónomos y
        no perder movilidad

        ficada con una placa en la que
        consta un número y el nombre de
        la persona que la cultiva. También
        hay un espacio de usos comunes
        con aseos, vestuarios y taquillas,
        además de aperos de labranza y
        una gran mesa, alrededor de la
        cual, los adjudicatarios de las tie-
        rras pueden acordar y debatir pro-
        puestas que llevarán después ante
        los representantes del Concello.  jubilados, pudiesen ser trabaja-   poner a punto un trozo de su par-
                                          das por vecinos más jóvenes. Se    cela para la siembra de productos
        El proyecto arrancó con una pri-  generó así una ejemplar interac-   de primavera, mientras su hijo
        mera fase en la que se adjudica-  ción entre personas de distintas   de 6 años no se cansa de descu-
        ron 31 parcelas que, dispuestas en   edades, intereses y niveles edu-  brir secretos de la tierra. Nunca
        terrazas o bancadas, van descen-  cativos y formativos. La tierra se   antes habían tenido un huerto y
        diendo desde el muro que rodea    convirtió en un nexo intergenera-  sus ocupaciones profesionales no
        el Convento de las Dominicas.     cional, que consiguió fomentar el   tienen nada que ver con la agri-
        Pero la demanda sobrepasó tan-    diálogo y el intercambio de cono-  cultura, pero les gusta que el niño
        to las expectativas previstas, que   cimientos agrícolas, entre adjudi-  vea cómo crecen los productos
        el ayuntamiento decidió habilitar   catarios veteranos y aquéllos que   que ellos mismos cultivan. En la
        otras 26 fincas más, al otro lado   recogen el testigo del arte para   finca colindante un joven arran-
        de la ruta de senderismo. En esa   cultivarla.                       ca  las  últimas  plantas  de  grelos
        ocasión, se ofreció también la po-                                   en flor, bajo la supervisión de un
        sibilidad de que las parcelas que   En las llamadas huertas de aba-  mayor, mucho más experto, que le
        no fuesen cubiertas por usuarios   jo, una pareja joven se afana en   va aconsejando desde el lindero.

                                                                                       Más información    9
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