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general, se convertirá, por méritos pro-
EL UNIVERSO CABALLERESCO
pios, en uno de los géneros que ali-
mentará la industria hispánica a lo lar-
• AMOR
go del siglo XVI.
Decían los clásicos que el Amor es un dios que convierte a los humanos en sus
Los libros de caballería, a pesar de
prisioneros y víctimas e impulsa al amante a demostrar mediante un sacrificado
contar con una variedad de más de
servicio purificador a su dama la nobleza de sus sentimientos. Amadís identifica
setenta títulos diferentes, desde fina-
a su amada Oriana como el norte hacia el que guiar su vida y cuando ella le reti-
les del siglo XV hasta las primeras
ra sus favores, a causa de un error, a causa de los celos, el caballero siente que
décadas del siglo XVII, mantienen una
su espíritu flaquea. Piensa en dejarse morir, aunque termina, convertido en Bel-
uniformidad formal que constituye
tenebros, como penitente en la Peña Pobre sin cuestionar jamás la decisión de
una de sus características más sobre-
su amada.
salientes. Esto hace que en su forma
Frecuentemente la pasión brota a través de la mirada, pero también se novelizan
externa – en tamaño folio- se configu-
otras fórmulas como el trovadoresco amor de oídas donde la fama del otro redu-
ren como un género editorial fácil-
ce los inconvenientes de la distancia; se emplea el enamoramiento a través de
mente identificable por los lectores de
sueños, concebido como resorte generador de enigmáticas expectativas, e inclu-
la época.
so es posible caer rendido ante la pintura que algún mago efectúa de determina-
Los libros de caballerías se plantean
do caballero.
como la exaltación de la figura de un
caballero cuya heroicidad se presupo-
• BANQUETE Y TORNEO
ne de antemano. Todo gira en torno a
Los torneos, que durante la Edad Media tenían una clara función: mantener acti-
su imagen, la que la mayoría de edicio-
vos y entrenados a los caballeros mientras no tuvieran que ir a la guerra, poco a
nes suelen hacer corresponder en sus
poco se van a llenar de elementos festivos y cortesanos. El torneo se convierte en
portadas con un grabado donde el
una pieza fundamental de las fiestas caballerescas, en una manera que tiene la
caballero aparece majestuoso, con sus
caballería de seguir mostrando su autoridad cuando en la guerra su presencia
credenciales características; sus
cada vez es más discreta.
armas, su cabalgadura, si acaso su
El banquete es uno de los momentos esenciales en cualquier fiesta caballeresca.
escudero. Luego, la promesa que vibra
Es un acto ceremonial en que todo está medido por las reglas de la cortesía y de
en los títulos, designados indistinta-
la etiqueta: desde la disposición de las mesas a la participación de los invitados.
mente como libros, crónicas o histo-
Supone la culminación de toda una serie de acontecimientos festivos. Es el
rias.
momento en que el anfitrión debe demostrar su agradecimiento y alegría
Cualquier lector de la época no tendría
mediante la cantidad y calidad de los manjares ofrecidos.
duda en reconocer un libro de caballe-
• CAZA
rías si se lo encontrara delante. Así no
La caza es una de las actividades preferidas por la nobleza tanto en la Edad
lo tienen el cura y el barbero –gran afi-
Media como en el Renacimiento. En muchos libros de caballería, se convierte en
cionados a su lectura, como el propio
un tópico narrativo el inicio de todo tipo de aventuras maravillosas tras el
hidalgo Alonso Quijano-, cuando
encuentro con un ciervo blanco. La caza del oso, en la que el caballero debe
entran en el “aposento” donde se
demostrar todo su valor y fuerza, también se convierte en motivo literario en los
encuentra su biblioteca, ni tampoco
libros de caballerías.
cuando el barbero señala en una
• DAMA
estantería otros que son más peque-
El caballero y la dama forman una unidad indisociable en estas obras. La dama
ños, ante lo que el cura afirma: “Estos
pasiva de los primeros libros de caballerías, forjada en el espejo de la Oriana
no deben de ser de caballerías sino de
amadisiana, tiene a extender sus rasgos caracterológicos a medida que se publi-
poesía”.
can nuevos textos. Junto a la princesa divinizada por sus pretendientes, aparece
Por su gran formato y por su extensión,
una dama intrépida que también gusta del movimiento y la acción, una dama
los libros de caballerías eran en princi-
que, sin haber utilizado previamente las armas, toma el hábito de caballero para
pio caros, aunque luego se depreciaran
buscar a su amado o incluso librarle de las manos de cualquier traidor.
en el mercado de segunda mano y de
Dados a extremar los atributos físicos de las damas, cuya sin par belleza puede
alquiler. Así se explica que Alonso Qui-
convertirse en un arma asesina para aquellos que la contemplan, algunas prin-
jano tuviera que vender “muchas
cesas se ven obligadas a residir en un total aislamiento de los varones. El que
hanegas de tierra de sembradura para
aspire a encontrarse con ellas deberá recurrir a la astucia, al ingenio o a procedi-
comprar libros de caballerías en que
mientos como el disfraz.
leer” (DQ,I,1).
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