Page 43 - ses264
P. 43
040-043SESENTA 5/10/07 02:01 Página 43
ALGUNOS CONSEJOS
Además de los conceptos anteriormente comentados, como la impe-
riosa necesidad de atrapar e intentar distanciarnos de pensamientos
catastrofistas que rondan siempre en lo más profundo de las mentes
de las personas que padecen dolor crónico, y la necesidad de apren-
der a detectar la tensión muscular y el relajamiento integral del orga-
nismo, la Dra. Moix propone otros consejos, no menos importantes
para alcanzar el equilibrio y armonía general:
1. Hacer un hueco para el sufrimiento LA BÚSQUEDA DE LOS VALORES VITALES
Por muy bien que afrontemos nuestro dolor, o nuestros problemas, en nues-
tra vida siempre habrá sufrimiento, es humano y normal. Así que en los
Muchas personas con dolor dejan de
momentos que nos sintamos hundidos, no debemos pensar que estamos
trabajar, abandonan sus aficiones y
haciendo algo mal, que somos unos desgraciados, que no estamos afrontan-
transforman sus hábitos, sintiéndose al
do la situación como deberíamos…, sino simplemente que el sufrimiento es
final perdidas, al haber perdido la brú-
algo normal. Paradójicamente, la felicidad sólo se consigue si logramos hacer
jula. Por este motivo, una de las técni-
un hueco en nuestra vida para el sufrimiento.
cas que se emplean con mayor éxito
2. Focalizar nuestra atención en actividades agradables tiene como objetivo reencontrar los
valores del individuo. Estas técnicas
Las personas con dolor están muy acostumbradas a que las personas que les
consisten fundamentalmente en refle-
rodean les aconsejen constantemente que se distraigan. El consejo es muy
acertado, sin embargo muy difícil de seguir. Los afectados de dolor crónico xionar y hablar entre la persona afecta-
es usual que estén algo o muy deprimidos y en esa situación es tarea com- da y el resto de los pacientes, utilizan-
pleja encontrar alguna actividad que te ilusione y con la que uno se pueda do metáforas sobre la vida. Una de
distraer. No obstante, así como nos obligamos a seguir los consejos del ellas es la del jardín, el cual hay que
médico, o seguir las pautas de nuestra medicación, debemos ‘obligarnos’ a imaginárselo con plantas; cada una de
hacer actividades, y no esperar a que nos vengan las ganas, porque esto no las cuales simboliza una parte impor-
se producirá.
tante de nuestra existencia, lo que uno
quiere en la vida (la familia, los ami-
3. Dejar de sentirnos inútiles gos, las aficiones, el trabajo, etc.), y el
La inutilidad es un sentimiento que suele acompañar a las personas que único jardinero que lo cuida es uno
sufren dolor. Y en muchos casos, las personas realizan una serie de activida-
mismo. Cada planta tiene un recorrido,
des totalmente contraproducentes en sus deseos de paliar este sentimiento.
un mantenimiento. ¿Cómo te gustaría
Abuelas octogenarias que siguen planchando montones de ropa a pesar de
que fuera tu jardín? Analiza la forma
su dolor de espalda, porque si no lo hacen se sienten faltan consigo mismas.
que tienes de cuidar tu jardín; ¿lo cui-
Si nos fijamos, cada uno se siente inútil por motivos diferentes (por no poder
das más los días que estás animado
planchar, por no poder seguir el ritmo laboral de antes…; todo depende de
‘para qué’ creíamos que servíamos. Afortunadamente, servimos para muchas que los días en que estás triste. Si el
más cosas de las que pensamos. El dolor nos ofrece una oportunidad magní- cuidado del jardín depende del humor
fica para servir de ejemplo a los demás si sabemos afrontarlo correctamente. del jardinero, ¿qué pasará con el jar-
dín? La metáfora del jardín es aplicable
4. No adoptar el rol de enfermo a nuestras relaciones con los demás
En algunas familias o parejas, la persona que sufre dolor se convierte en el (familiares, amigos, vecinos, trabajo,
enfermo al que se debe cuidar. A veces, las personas que rodean al afectado aficiones, etc.). Piensa, por tanto, qué
se desviven por cuidarlo; sin embargo, esas buenas intenciones pueden aca- jardín te gustaría tener y en cómo
rrear sensaciones perversas. En algunas ocasiones, las personas cuidadas, si deberías cuidarlo.
disfrutan o se lo pasan bien, ¡se sienten culpables! Porque si los demás los Algunas personas no saben realmen-
cuidan tanto es porque están enfermos y, por tanto, si lo están, no pueden
te lo que les importa; el problema de
disfrutar. Es como si disfrutando dejaran de merecerse los cuidados.
otras, en cambio, reside en que cuan-
Debemos, por tanto, no adoptar el papel de enfermo, que nos cuiden porque
do se les pregunta qué les gustaría
tenemos dolor es una cosa, pero otra distinta es que seamos enfermos que
hacer con sus vidas, proponen objeti-
no podamos disfrutar.
vos imposibles de conseguir.
Sesenta ymás 43