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              Fausto Turell en su estudio de música.

              radio seguía funcionando, a que el reloj  ta de una novela de ciencia ficción con  sintonizadores. No tardan en producir-
              de cuerda se bloquease en una hora    citas bíblicas; el borrador ocupa 210  se las primeras llamadas, y Fausto les
              determinaba, que señalaba algo muy    páginas, y está formado por doce capí-  comenta a todos sus alumnos, todo
              concreto para Fausto, mientras que la  tulos. En esta singular historia se   orgulloso, que está acompañado por un
              cuerda del reloj estaba a tope; o la apa-  entremezclan escenas futuristas, por-  periodista de “Sesenta y Más…”.
              rición de unas llaves perdidas, dejadas  que la obra está concebida en la ciu-  Como podemos ver, Fausto lleva una
              sobre el techo del coche en la calle.  dad de Nueva York, en el mes de agos-  vida que no tiene tiempo para el aburri-
              Este compendio de anécdotas, que      to del 2036, y, utilizando un lenguaje  miento; su mente es capaz de poder
              estoy leyendo con el mayor interés, y un  capaz de llegar a lo más profundo del  desarrollar varias cosas al mismo tiem-
              cierto nerviosismo, no deja a nadie   espíritu humano, Fausto logra llevar a  po: mientras crea una hermosa canción,
              impasible, porque hay momentos en     cabo una serie de diálogos, en el Más  lee los capítulos de un libro, dibuja un
              que produce escalofríos, está inédito, y  Allá, con la Biblia como referencia y  cuadro, o da clases por radio a alguno
              no estaría mal que alguna editorial se  cita obligadas. Este trabajo sigue igual-  de sus alumnos. Su esposa, Pilar, de vez
              interesara por él, porque en sus páginas  mente inédito, pero que, con toda  en cuando también se incorpora al dúo,
              hay numerosas referencias a la vida   seguridad, no tardará en convertirse en  unas veces cantando y otras recitando
              cotidiana, que resultan de un modo    un libro de lectura obligada, para una  estrofas de nuevas poesías, en la habi-
              muy peculiar, porque Fausto tiene una  sociedad como la nuestra, en donde se  tación que tienen debidamente habilita-
              mente portentosa, pero que todo cuan-  van perdiendo los valores. Pilar Almol-  da para ello, recubierta de grueso cor-
              to relata en estas historias –jura ante la  da, su esposa, en estos momentos le  cho para no molestar al vecindario.
              Biblia– han sucedido de verdad.       recuerda que está a punto de comenzar  Ambos han logrado a diseñar un mundo
                Mucho más reciente es el trabajo    las clases de solfeo, y que ha de pre-  de amor y respeto; en el edificio son
              literario “Y Dominadla”, terminado    pararse, al tiempo que prepara las     bien conocidos, queridos y admirados,
              hace pocos meses. En este caso se tra-  conexiones de la emisora y afina los  como hemos podido comprobar.



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