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I NVESTIGACIÓN
Tecnología inalámbrica para interconectar
cerebro y máquina
El equipo del proyecto
«Braingate», que busca
interconectar el cerebro
con la máquina, está
llevando a cabo un
proyecto científico más
que ambicioso y que
promete convertirse en
una realidad.
Perder la conexión entre el ce-
rebro y las extremidades es
una de las formas de disca-
pacidad más severa. El cableado
orgánico de los nervios cesa de
transmitir lo que ordena el cere-
bro y la capacidad de moverse lle-
ga a su final. Pero para el equipo
de «Braingate», con su proyecto
científico gestado en Estados Uni-
dos y que ahora se ha instalado
también en Europa, ese final ha
sido el principio de su trayectoria sentido. Hacemos exactamente
de 10 años dedicados a resolver el
problema de la parálisis.
Un objetivo muy ambicioso,
pues la clave para luchar contra
esta situación pasa por desarro-
llar un sistema nervioso artificial izquierda”. Luego se convierte ese
que pueda suplir al dañado: se
trata, en primer lugar, de inter-
pretar los deseos del cerebro; y
después, de enviar esas órdenes
de movimiento a un dispositivo
como una silla de ruedas o un
exoesqueleto.
“La idea fundamental es lograr
que las personas con parálisis
vuelvan a interactuar con el mun-
do otra vez. Para ello, trabajamos
en interpretar cómo son los pa-
trones eléctricos del movimiento”,
explica a «Open Mind» John Do-
noghue. Es el líder de este pro-
yecto en el que trabajan más de
50 científicos de Universidades
como Stanford o Brown y que él
coordina desde el Wyss Center
de Ginebra.
A54 perusotnoanl omía
Los investigadores se proponen desarrollar un sistema nervioso artificial
que pueda suplir al dañado
Donoghue ha explicado que el impulso cerebral, un mapa eléctri-
proceso se parece a cómo activa co de una orden concreta, a len-
sus píxeles una pantalla de tele- guaje de ceros y unos que pueda
visor: “Si miras muy de cerca un interpretar una computadora. El
televisor, verías el destello de uno último paso es transmitir esa orden
de los pequeños cuadrados que a un dispositivo externo, como un
forman la imagen. Si lo miras des- brazo robótico o un ordenador.
de cerca, carece de sentido. Pero
al ver la imagen completa, tiene El proyecto «Braingate» (la
puerta del cerebro) lleva en mar-
eso. Tomamos muestras parciales cha desde 1998 buscando inter-
y luego reconstruimos el patrón”. conectar el cerebro con la má-
quina, de modo que las órdenes
Y sorprendentemente es bastan- cerebrales (los pensamientos)
te simple. Y cambia cuando quieres puedan transmitirse a un ordena-
mover la mano arriba, abajo o a la dor que realizaría y desarrollaría
dichos comandos.
Un cerebro con WiFi
Hay otros desafíos a los que debe dedicarse Braingate al mar-
gen de descifrar el léxico del cerebro. Uno de los esenciales es
construir un dispositivo que pueda integrarse en el cuerpo del
paciente y mandar de manera inalámbrica sus órdenes, sus pen-
samientos, a todo tipo de dispositivos. Es como tener un mando
a distancia implantado en el cerebro, para controlar directamente
el televisor, la computadora, una silla de ruedas o un brazo robó-
tico.
Y esta misma tecnología, capaz de mover con el pensamiento un
brazo robótico, se aplicaría también a pacientes amputados. Más
allá de la aplicación inicial de superar la parálisis, la tecnología
de este proyecto para desarrollar una interfaz de comunicación
entre el cerebro y ordenadores, es una herramienta muy útil para
vencer otros tipos de discapacidades que dificultan considerable-
mente la vida diaria.