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NUESTRO MUNDO
Autismo, tierra ignota
Ps. Gustavo Guerra Director General, Centro Psicoasistencial y Educativo (Comunidad Psiqué, Montevideo- Uruguay)
El dispositivo comunitario, nuestra forma de abordaje
UN POCO DE HISTORIA mejorar y potenciar sus posibili- persiguen, del “para qué” y del
dades de acceder a una mejor ca- “por qué” se deben adquirir.
Desde la minuciosa descrip- lidad de vida.
ción que Leo Kanner hiciera de lo Por ejemplo un niño podría
que llamó “autismo infantil pre- LA TIERRA DESCONOCIDA controlar esfínteres por un condi-
coz” en 1943, hasta nuestros dí- cionamiento estímulo-respuesta,
as, ha pasado más de medio si- Continuando con la metáfora, pero preferimos que aprenda que
glo y el autismo sigue guardando, habrá quienes lleguen a tierras debe hacerlo porque reconoce su
por lo menos en esencia, los mis- desconocidas, sólo para investi- propia incomodidad, porque su
mos misterios, las mismas incóg- gar o para someter a sus habitan- cuerpo a través de diferentes acti-
nitas que otrora. tes, explotarlos, saquearlos y ha- vidades comienza a ser habitable,
brá quienes intenten comprender se despiertan sensaciones a las
Estudios genéticos, bioquími- sus códigos, acercarse humana- que era totalmente ajeno (frío-ca-
cos y fisiológicos no resultan aún mente y demostrar afectos. lor, dolor- placer, repulsión- satis-
suficiente explicación para dar facción, etc.)
cuenta de esta compleja forma de El niño autista es fácilmente
“estar en el mundo”. “amaestrable”, pero es un niño Esto viene de la mano de tér-
no un animalito. minos tales como, socialización,
Ta lvez nos plantee la misma organización interna, integración
dificultad que intentar explicar el Entonces preferimos el apren- de su imagen corporal, amplia-
alma, el “atman” del sánscrito, dizaje a través de la comprensión, ción de sus posibilidades comuni-
ese “soplo de vida” que nos se- la tolerancia, la contención y el cativas, acceso a nuevas formas
para del resto de la especie ani- afecto. de significación, etc.
mal, por hacernos seres concien-
tes de nuestra existencia. Respetando tiempos, poten- Aspectos todos que juegan a
ciando habilidades, corrigiendo favor de la adquisición de ciertas
Mientras tanto nos sorprende- modos de comunicación que pa- autonomías, de la consolidación
mos intentando descifrar un mo- radójicamente no parecen comu- y fortalecimiento de lazos vincula-
do de comunicación diferente y nicar nada, decodificando emo- res, en definitiva de la sofistica-
en eso sí hemos podido avanzar, ciones y sensaciones, poniendo ción y potenciación de su mundo
desde la publicación de Bruno palabras allí donde el niño no las relacional.
Bettelheim, “La fortaleza vacía” encuentra, enseñando a su fami-
durante los setentas hasta las po- lia, nuevas y variadas formas de Aprender no es algo natural e
sibilidades de comprensión ac- relacionamiento, etc. inherente al “ser humano”, sino
tuales sobre las manifestaciones que es algo a crear en el “ser so-
del autismo, mucho camino se ha Al niño que se le imponen con- cial” y para algunos resulta más
transitado. ductas, no se lo enseña, se lo ro- difícil que para otros lograrlo.
botiza.
Y nos consta que aunque no Dice Lacan: “El hombre se
todo esté descubierto, ni explica- Para formar hábitos, debe ha- aprehende como cuerpo, como
do, mucho podemos hacer por ber por lo menos una mínima forma vacía del cuerpo, en un
comprensión del fin que ellos movimiento de báscula, de inter-
cambio con el otro. Asimismo,
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Autismo, tierra ignota
Ps. Gustavo Guerra Director General, Centro Psicoasistencial y Educativo (Comunidad Psiqué, Montevideo- Uruguay)
El dispositivo comunitario, nuestra forma de abordaje
UN POCO DE HISTORIA mejorar y potenciar sus posibili- persiguen, del “para qué” y del
dades de acceder a una mejor ca- “por qué” se deben adquirir.
Desde la minuciosa descrip- lidad de vida.
ción que Leo Kanner hiciera de lo Por ejemplo un niño podría
que llamó “autismo infantil pre- LA TIERRA DESCONOCIDA controlar esfínteres por un condi-
coz” en 1943, hasta nuestros dí- cionamiento estímulo-respuesta,
as, ha pasado más de medio si- Continuando con la metáfora, pero preferimos que aprenda que
glo y el autismo sigue guardando, habrá quienes lleguen a tierras debe hacerlo porque reconoce su
por lo menos en esencia, los mis- desconocidas, sólo para investi- propia incomodidad, porque su
mos misterios, las mismas incóg- gar o para someter a sus habitan- cuerpo a través de diferentes acti-
nitas que otrora. tes, explotarlos, saquearlos y ha- vidades comienza a ser habitable,
brá quienes intenten comprender se despiertan sensaciones a las
Estudios genéticos, bioquími- sus códigos, acercarse humana- que era totalmente ajeno (frío-ca-
cos y fisiológicos no resultan aún mente y demostrar afectos. lor, dolor- placer, repulsión- satis-
suficiente explicación para dar facción, etc.)
cuenta de esta compleja forma de El niño autista es fácilmente
“estar en el mundo”. “amaestrable”, pero es un niño Esto viene de la mano de tér-
no un animalito. minos tales como, socialización,
Ta lvez nos plantee la misma organización interna, integración
dificultad que intentar explicar el Entonces preferimos el apren- de su imagen corporal, amplia-
alma, el “atman” del sánscrito, dizaje a través de la comprensión, ción de sus posibilidades comuni-
ese “soplo de vida” que nos se- la tolerancia, la contención y el cativas, acceso a nuevas formas
para del resto de la especie ani- afecto. de significación, etc.
mal, por hacernos seres concien-
tes de nuestra existencia. Respetando tiempos, poten- Aspectos todos que juegan a
ciando habilidades, corrigiendo favor de la adquisición de ciertas
Mientras tanto nos sorprende- modos de comunicación que pa- autonomías, de la consolidación
mos intentando descifrar un mo- radójicamente no parecen comu- y fortalecimiento de lazos vincula-
do de comunicación diferente y nicar nada, decodificando emo- res, en definitiva de la sofistica-
en eso sí hemos podido avanzar, ciones y sensaciones, poniendo ción y potenciación de su mundo
desde la publicación de Bruno palabras allí donde el niño no las relacional.
Bettelheim, “La fortaleza vacía” encuentra, enseñando a su fami-
durante los setentas hasta las po- lia, nuevas y variadas formas de Aprender no es algo natural e
sibilidades de comprensión ac- relacionamiento, etc. inherente al “ser humano”, sino
tuales sobre las manifestaciones que es algo a crear en el “ser so-
del autismo, mucho camino se ha Al niño que se le imponen con- cial” y para algunos resulta más
transitado. ductas, no se lo enseña, se lo ro- difícil que para otros lograrlo.
botiza.
Y nos consta que aunque no Dice Lacan: “El hombre se
todo esté descubierto, ni explica- Para formar hábitos, debe ha- aprehende como cuerpo, como
do, mucho podemos hacer por ber por lo menos una mínima forma vacía del cuerpo, en un
comprensión del fin que ellos movimiento de báscula, de inter-
cambio con el otro. Asimismo,
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