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problema psicológico la víctima recla-
ma sus derechos y quiere que se le
haga justicia. Confieso que me sentí
indignado cuando escuché a un psi-
quiatra decir que se encontraba despis-
tado frente al mobbing, porque se tra-
taba de una dolencia nueva, y también
me parece indignante la actitud de
algunos letrados, que no se quieren
implicar en estas causas, por lo que
ellos denominan la dificultad en la
prueba.
— ¿En la legislación española está tipi-
ficado el mobbing?
Este es un punto clave ya que el
acoso psicológico en el trabajo no está
reconocido como hecho delictivo ni
tampoco aparece recogido en la legis-
lación laboral. Creo que se ha perdido
una gran oportunidad al no incluir el
mobbing en la Ley de Prevención de
Riesgos Laborales de 1995, aunque
parece ser que en el Senado se han
presentado iniciativas para incorporar
el mobbing en la legislación sociola-
boral. Actualmente países como
Francia, Italia, Reino Unido, Suecia,
Suiza y Dinamarca reconocen el mob-
bing como un delito laboral y penal.
— ¿Existen en nuestro país asociacio-
nes contra el mobbing similares a la
que usted colabora?
A mi entender los sindicatos españo-
les han fracasado porque tenían que
haber abordado esta epidemia laboral
con el mismo impulso con que se han
enfrentado a la siniestralidad laboral.
Antes de presentar mi libro en el mes de
mayo, invité a los sindicatos mayorita-
rios para que lo conocieran, pero no
mostraron mucho interés porque según
me informaron tenían sus propias publi-
caciones. Precisamente a uno de los
representantes sindicales les dije:
bueno si informáis tan bien a las vícti-
mas ¿como es posible que el 81% de
ellas no sepa que padece mobbing?.
Debido a esta situación se están crean-
do asociaciones como a la que perte-
nezco. En Asturias se ha constituido
una, a la que iré para presentar mi libro, denunció sufrir humillaciones ante sus
y también tengo noticias de otra en
Andalucía. Los socios son personas de
todas las edades, incluso jubilados, que
han sufrido o están sufriendo mobbing.
— ¿Qué servicios puede encontrar una
persona en su asociación Mobbing “Alto
Ya para el Sur de Madrid”?
Una vez que la persona nos explica
su caso, le abrimos una ficha confi-
dencial y le ofrecemos el asesora-
miento de un psicólogo, de un aboga-
do y el mío como graduado social.
Encauzamos la correspondiente recla-
mación basándonos en la Ley de
Prevención de Riesgos Laborales de
1995, puesto que todavía no se puede
actuar por la vía penal, aunque diré
que nada más publicar mi libro en el
mes de mayo, me enteré de una sen-
tencia del Juzgado número 28 de lo
social de Barcelona en la que por pri-
mera vez se condenaba a una empresa
y a un jefe de producción a una
indemnización por practicar mobbing
contra unas trabajadoras, y también
que un Juzgado de lo Penal había
admitido a trámite la querella presen-
tada por un trabajador en la que
compañeros. Se avanza muy lenta-
mente, pero creo que el impacto social
del mobbing acelerará la toma de solu-
ciones, ya que se cifra en 18 millones
de euros anuales las pérdidas ocasio-
nadas en España por mobbing. Por eso
es muy importante la publicidad y la
difusión de obras como mi libro, a tra-
vés de medios como la revista Sesenta
y Más, porque los mayores por sus vín-
culos familiares y sociales pueden
ayudar a personas de su entorno que
padezcan mobbing. Mi libro ayuda a
comprender a los profesionales qué es
y qué no es el mobbing, como se prac-
tica, los perfiles del acosador, los sín-
tomas, la repercusión en la vida social
y laboral, como defenderse del acoso,
casos reales, la prevención de las adi-
ciones al alcohol y los tranquilizantes,
la legislación, la curación y la integra-
ción, así como los últimos datos sobre
el mobbing. Mi mayor satisfacción es
que este libro que en verano va por la
segunda edición, esté al alcance de
todos los trabajadores.
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