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CARTAS |












        Los libros de “Memorias”          extensa experiencia, que proporcio-  Los libros de “Memorias” de algún
                                          nan los años. Recordemos el dicho:   modo complementan a la Historia,
        Las personas cuando pasan de los   “más sabe el demonio por viejo que   suelen ser muy amenos, nos enseñan
        sesenta años y no digamos de los   por diablo.                       mucho y nos permiten conocer direc-
        setenta  u ochenta, tienen manifiesta                                tamente a su protagonista en la reali-
        tendencia en las reuniones familiares   Por lo tanto, podemos decir que,   dad de la existencia que le tocó vivir
        y de amigos de contar algo de sus vi-  cuando se llega a cierta altura de la   con su drama y su comedia.
        das, que, muchas veces, se han visto   vida, todo hombre o mujer tiene mu-
        involucradas o han tenido alguna   chas cosas que contar por lo que ha         Ángel Las Navas Pagán
        relación, directa o indirectamente,   vivido, ha visto y oído, aparte de las                 Madrid
        con alguno o algunos de los dramá-  ideas que brotan en su mente por la
        ticos acontecimientos y muy diversas   cultura adquirida de diversas formas   Mi silla
        crisis que han sacudido la vida na-  y por las reflexiones de su propia in-
        cional o internacional y han sufrido   teligencia, ya que ésta es como un   En una silla me siento,
        sus tristes consecuencias. El confesar   diamante que se va puliendo con las   a leer mis poesías
        las experiencias, opiniones y sabe-  constantes aportaciones que recibe   y me siento tan feliz
        res, adquiridos en muy variadas cir-  del exterior y los frecuentes ejercicios   pues sé la terapia mía.
        cunstancias, es un natural desahogo   mentales que tiene que realizar (lec-
        humano. Y muy particularmente de   turas, estudio, meditaciones...).  Mientras escribo y leo,
        los contertulios de las famosas “pe-                                  mi mente está despejada
        ñas” de café, tan en boga en el siglo   Por lo cual todas las personas con las   de los malos pensamientos
        XIX y primera mitad del XX. Hay   condiciones indicadas y empleando   que la vida nos depara.
        que hacer especial mención de las   cierto estilo literario, pueden escri-
        sugestivas e interminables “peñas   bir sus memorias, que, por su hondo   El poeta escribe dramas
        literarias” con sus muchas anécdo-  contenido humano, serán interesan-  también escribe lo bello
        tas y ocurrencias, que, en numerosas   tes. Sin embargo, los autores de me-  no buscamos los laureles
        ocasiones, saltaron a las páginas de   morias que  van a la  imprenta,  son   ni la fama ni el dinero.
        los periódicos y hasta de las novelas.   reducidos. Porque la comercialidad
        Pues, no en balde pontificaban los   de este género literario está basada   Sólo buscamos que el mundo
        eximios maestros de las Letras, con-  en que sus escritores sean personajes   sea más humano y bueno
        virtiendo a estas simpáticas reunio-  famosos en la opinión pública por   por eso yo mis problemas
        nes, ante una taza de café y las volu-  algún motivo. Y entonces está ase-  los soluciono en silencio,
        tas de humo de los cigarrillos, en una   gurado el éxito económico.   porque todo lo que escribo
        especie de pequeños ateneos, en los                                   es la verdad lo que siento.
        que se discutían, a veces acalorada-  Estos libros de memorias suelen ser
        mente, toda clase de temas humanos   interesantes, porque nos hablan de   Recuerdo siendo yo niña,
        y hasta divinos.                  una serie de circunstancias, intimi-  igual que todos ustedes,
                                          dades, secretos..., todo ello mezclado   teníamos gran respeto
        Las prisas de la vida moderna han   con una época o épocas de la Histo-  sin tener tantos placeres.
        ido acabando con aquellas seducto-  ria  con  todas  sus vicisitudes.  Todo
        ras tertulias de ambiente romántico,   ello en clave de una profunda con-  Entonces era pecado
        que eran como pequeños templos    fesión. Es como un relato en el que   contestar a los mayores
        de la conversación con sus múlti-  todo lo que se narra ha sido verdad   que con nuestra educación
        ples deliberaciones y conclusiones,   con personajes reales. Para que las   complacemos los menores.
        cuyas enseñanzas siempre se produ-  memorias alcancen su plenitud de
        cen cuando hay comunicación entre   valor, requieren estar escritas con un      Leandra Pérez Pérez
        personas de cierta cultura y nivel in-  básico criterio de serenidad, objetivi-  Escalona (Toledo)
        telectual, avalada sobre todo por la   dad y veracidad.

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