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Reportaje MI MASCOTA Y YO

las mejoras psíquicas, se pueden terapéuticas como la Hipoterapia este tipo de técnicas –porque se
conseguir interacciones verbales, –Terapia Asistida por Caballos– y la obsesione con el animal, porque no
desarrollar la autoestima, paliar la Delfinoterapia –Terapia Asistida por confíe en las expectativas de cura-
soledad y la ansiedad o fomentar la Delfines–. ción o, simplemente, porque resulte
atención. Desde un punto de vista alérgico–. Los animales también
menos “médico”, hay que destacar CUESTIÓN DE CARIÑO pueden llegar a sufrir mucho, por
que pueden alcanzarse sentimientos eso es necesario que sean controla-
deseables como la empatía, la socia- Aunque los animales son de gran dos por un veterinario que esté pen-
lización y la aceptación. Pero no sólo ayuda para el ser humano, a veces, diente de sus cuidados básicos. La
las mascotas convencionales pueden la intención no es lo único que terapia con mascotas se ha conver-
ser utilizadas para lograr efectos cuenta, y puede darse el caso de tido en una práctica común entre
terapéuticos. Si bien el perro es un que al enfermo no le favorezcan grupos de voluntarios en algunos
animal asombroso por su capacidad países, desde hace ya algunas déca-
de aprendizaje, su obediencia, fideli- das. Como un concepto acuñado de
dad y el amor incondicional que pro- los programas de terapia animal tra-
fesan, hoy en día existen alternativas dicionales, la terapia de mascotas

Encarna y Rocky ga de los gatos, pero cuando llegó él,
me hizo ilusión, es como un niño. Hay
que tener mucho valor para dejar a
ncarna Serrano y su marido, los animales tirados y nosotros no lo
Julián del Olmo, son los dueños tenemos. A Rocky no le gusta estar
Ede Rocky, uno de esos gatos que solo, se estira en el sillón y busca el
al pasearse parece que se pavonean. calor de Encarna y Julián, pero marca
El minino tiene, como todos, su pro- su sitio, su territorio, eso sí, con cari-
pia historia: Nosotros no teníamos ño. Se arrima a sus dueños y recibe la
idea de comprar un gato, a mí siem- caricia que espera; lo que no sabe es
pre me habían gustado mucho los Encarna y su marido Julián con Rocky. que recibiendo, da más de lo que
perros, había convivido con ellos y me imagina. Desde luego, he terminado
encantan, pero no pensaba tener otro es gamberrillo pero muy bueno y muy dando gracias porque la niña se enca-
animal. Hasta que un día lo encontra- sociable, excepto con los niños, que prichara con el gato; ahora mismo,
mos y con nosotros se quedó. En el le dan pavor. Lo que no le gusta nadie sabe la compañía que nos hace
garaje de nuestra casa le vimos, debió mucho es estar en la calle, es muy y la alegría que nos da, afirma Julián.
colarse por unas chimeneas que hay, casero, le gusta el calorcito. Los gatos Muchas personas tienen la enorme
y Julián y mi hija Gema decidieron necesitan cuidados, como cualquier suerte de poder disfrutar de un ani-
cambiarle la vida y que nos lo quedá- ser vivo, pero no precisan de muchas mal de compañía pero, antes de que
ramos. Así que fue el gato quién ter- visitas al veterinario; esto facilita a las una mascota entre en casa, se debe
minó cambiándonosla a nosotros, personas mayores que no pueden hacer un análisis y pensar si se tiene
cuenta Encarna. salir con frecuencia, el atender debi- la capacidad económica y el tiempo
Rocky no es muy travieso, araña el damente a su mascota. necesario para poder cuidarlo y
sillón del salón, pero cuando hace la Según Encarna, Rocky me ayudó mimarlo como se merece. No pode-
trastada pide disculpas con los ojitos, mucho psicológicamente. Cuando los mos dejar de destacar que son múlti-
y cualquiera le perdona. Es muy listo, hijos empezaron a hacer su vida, él ples las ventajas: no solo aportan ter-
como todos los gatos… Dice Encarna: estaba aquí, y me hacía mucha com- nura y amistad, sino que llenan el
él solo necesita su arena y su comida, pañía, no me sentía triste muchas hogar de alegría y calor. A medida
no da trabajo ni problemas, y es muy veces gracias a él. Es cierto que da que vamos haciéndonos mayores,
agradecido. Como todos los animales, alegría a la casa, y yo no era muy ami- más necesitamos ese afecto y esa

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